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FECHA DE ACTUALIZACIÓN: 2012/03/07
Código del Sitio fa18790 Código Declaración de privacidad 22556
grupo Ética práctica
etiqueta abominación|niño|sepelio|panteón
RESUMEN DE LA PREGUNTA
¿Acaso llevar a los niños al sepelio o al panteón tiene aversión?
cuestión
Tengo un hijo varón de diez años. Mi esposa se queja porque lo llevo a los sepelios. Dice que llevar a los jóvenes a ese tipo de ceremonias y a los panteones tiene aversión. En caso de existir hadices y narraciones a este respecto le agradeceré me los remita.
Un breve

La participación de los niños en reuniones y ceremonias religiosas, tales como llevarlos a las mezquitas, a las reuniones de duelo el mes Muharram o en otros eventos religiosos tales como participar en la oración del Id Fitr, y en las fiestas religiosos son muy útiles para desarrollar los sentimientos religiosos de ellos.

Pero llevar a los jóvenes a los sepelios y panteones, según la investigación realizada en las narraciones y en las obras de jurisprudencia, no encontramos narración alguna respecto a la aversión de este acto.

Si su esposa se refiere a una narración en especial o tiene una razón determinada escríbanos nuevamente mencionándolo para que volvamos a analizarlo.

A continuación recordamos algunos puntos relacionados con la pregunta realizada:

1. Las narraciones existentes que mencionan la recompensa que se adquiere por dar el pésame a la persona que está de luto son absolutas e incluye también a los jóvenes.

2. De la costumbre practicada por los Inmaculados Imames (a.s.) puede deducirse que llevar a los niños al panteón no es prohibido. Vemos como el Imam ‘Alî (a.s.) y por la indisposición y enfermedad de la honorable Fátima (s.), preparó un lugar en las afueras de Medina en el panteón de Baqî, llamado Baît Al-Ahzân (casa de la tristeza), y acompañado de Fátima, Hasan y Husayn que eran todavía muy pequeños se dirigían a ese lugar y lloraban por el fallecimiento del gran Profeta (s.a.w.) y por las tragedias surgidas.[1]

3. Es digno de mencionar que debe ponerse atención en que al llevar a los jóvenes a ese tipo de ceremonias los programas no superen la tolerancia y paciencia de ellos, llegando a cansarlos. Así también deben llevarlos a reuniones en las cuales los actos de algunas personas no provoquen efectos negativos en su ánimo.

 

 

Esta pregunta no tiene respuesta detallada.

 


[1]– ‘Alâmah Maÿlisî, Bîhâr Al-Anwâr, t.43, p.177.